Uruguayos acusan a la policía de Nueva York de fuerza excesiva durante la celebración de la Copa América
POR JOSE BAYONAUna fiesta de fútbol en Queens salió mal el domingo, y los aficionados acusan a los policías de Nueva York del uso de fuerza excesiva.
Después de la final de la Copa América en Argentina, cientos de uruguayos en Jackson Heights se encontraron en las calles por la victoria de Uruguay en la Copa América.
Minutos después, decenas de policías de la Comisaría 115o llegó a 37th Ave. y 84th St. y comenzó a empujar a la multitud, dando lugar a enfrentamientos, dijeron testigos.
"No pude llamar al 911. Eran las mismas personas que abusan de nosotros", dijo Silvana Sislian, de 46 años, gerente de La Gran Uruguaya de panadería en 37th Ave.
Pero los funcionarios de policía de Nueva York, dijeron ayer oficialmente: "una respuesta apropiada para tratar con elementos desordenados", entre una multitud de cientos de personas.
"Cuando la policía llegó al lugar," Sislian dijo unos policías rompieron banderas de Uruguay - un acto que irritó a la multitud y se desató una pelea.
"Más de 20 agentes se alinearon frente a la panadería y comenzó a empujar a la gente alrededor, especialmente los más jóvenes", dijo. "La gente trataba de esconderse dentro de la panadería."
"Los uruguayos siempre han tenido una buena relación con el Distrito 115, y la policía estropeó el día más importante en los últimos 20 años de la historia del fútbol de Uruguay", dijo Sislian.
Había 700 a 800 personas en la multitud, dijo el portavoz de policía de Nueva York Paul Browne.
Cinco fueron arrestados y acusados de obstruir la administración gubernamental, resistencia al arresto y conducta desordenada, el subinspector Kim dijo Royster.
Dos agentes fueron atendidos en un hospital por contusiones.
Ronel Mendoza, 19 años, fue uno de los detenidos. Dijo que estaba tocando la batería en 37th Ave. cuando los policías llegaron.
"Entré en la panadería para encontrar a mi hermana, y me arrestaron por nada", dijo Mendoza, quien fue liberado la tarde del lunes.
Antonio Carvallo, de 78 años, dijo que estaba empujando su andador y la celebración en la calle cuando fue empujado hacia atrás con la multitud por la policía.
"Estábamos celebrando, no aterrorizar", dijo Carvallo. "Me sentí impotente y furioso contra los que llevan un uniforme azul."
Estos videos muestra la brutalidad con que fueron reprimidos los festejos espontáneos de uruguayos después de la obtención de la Copa América.
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